El retículo endoplasmático es un orgánulo celular compuesto por membranas interconectadas (Rubio, 2019). Estas membranas se extienden desde el núcleo celular, que es el centro de la célula. Se identifican dos tipos de retículo endoplasmático: el rugoso y el liso. El retículo endoplasmático rugoso se caracteriza por sus membranas que forman cisternas aplanadas, en las cuales se encuentran estructuras esféricas llamadas ribosomas. Por otro lado, de acuerdo con Rubio (2019), el retículo endoplasmático liso se organiza en membranas que forman túbulos, pero carece de ribosomas en su superficie.
¿Qué es el Retículo Endoplasmático Liso?
El retículo endoplasmático liso es un orgánulo celular esencial en las células eucariotas, caracterizándose por su apariencia lisa, ya que no cuenta con ribosomas adheridos a su membrana (Fernández, 2024). Este orgánulo se compone de un conjunto interconectado de estructuras tubulares y membranosas, que se extienden en las cisternas del retículo endoplasmático rugoso (Rubio, 2019). A diferencia del retículo endoplasmático rugoso, el retículo endoplasmático liso carece de ribosomas en sus membranas, lo que explica su denominación de “liso” (Fernández, 2024). Debido a esta ausencia de ribosomas, Rubio (2019) menciona que, las proteínas presentes en este orgánulo provienen del retículo endoplasmático rugoso.
Este orgánulo desempeña funciones vitales para la supervivencia tanto de la célula como del organismo en el que se encuentra (Rubio, 2019). Su participación es crucial en procesos como la síntesis de lípidos, la desintoxicación de alcohol y otras sustancias nocivas, así como la regulación de los niveles de glucosa en sangre. Además, conforme con Rubio (2019), el retículo endoplasmático liso actúa como un reservorio de minerales esenciales, incluyendo el calcio.
Funciones
Síntesis Lipídica
Este orgánulo es responsable de la síntesis de la mayoría de las grasas que componen las membranas celulares, incluyendo colesterol y glicerofosfolípidos (Megías et al., 2023). Es importante señalar que, en lugar de simplemente sintetizar, en el retículo endoplasmático liso se lleva a cabo el ensamblaje de lípidos, utilizando materia prima proveniente de otros orgánulos (Rubio, 2019). Por ejemplo, para la producción de glicerofosfolípidos, se requieren ácidos grasos que se obtienen del citosol. Según Rubio (2019), los lípidos se transportan hacia las membranas que formarán, ya sea mediante vesículas o a través de proteínas transportadoras.
Uno de los productos sintetizados en el retículo endoplasmático liso es el colesterol, un componente esencial de la doble capa lipídica de la célula (Rubio, 2019). Este colesterol se transporta desde el orgánulo hasta la membrana plasmática mediante transportadores proteicos solubles. Además de colesterol, el retículo endoplasmático liso también produce triacilgliceroles, que son lípidos presentes en las células adiposas, las cuales almacenan grasa para el aislamiento térmico y como reserva alimenticia. Asimismo, conforme con Rubio (2019), está implicado en la síntesis de varias hormonas, incluidas las hormonas esteroides, los ácidos biliares y la fracción lipídica de las lipoproteínas.
Detoxificación
El proceso de detoxificación se refiere a la transformación de sustancias, como drogas y metabolitos generados en reacciones internas del organismo, en compuestos hidrosolubles que pueden ser excretados a través de la orina (Porto & Gardey, 2014). Esta conversión es posible gracias a la presencia de enzimas oxigenasas, que se encuentran en las membranas del retículo endoplasmático liso, como la familia de proteínas del citocromo P450 (Rubio, 2019). Esta familia de enzimas es fundamental en el metabolismo de fármacos. La detoxificación se realiza principalmente en las células del hígado, denominadas hepatocitos, que se caracterizan por poseer un retículo endoplasmático liso muy desarrollado. En correspondencia con Rubio (2019), es relevante mencionar que la ausencia de ribosomas en este tipo de retículo permite una mayor superficie de acción enzimática en relación al tamaño del orgánulo.
Desfosforilación de la Glucosa-6-Fosfato
La glucosa, un tipo de azúcar, se almacena en forma de glicógeno, principalmente en el hígado (Rubio, 2019). Por lo tanto, este órgano se encarga de introducir azúcar en el torrente sanguíneo mediante dos hormonas que regulan este proceso: el glucagón y la insulina (Megías et al., 2023). Cuando el glicógeno se degrada, produce glucosa - 6 - fosfato (Rubio, 2019). Esta sustancia no puede abandonar la célula, ya que no es capaz de atravesar las membranas. De acuerdo con Rubio (2019), la glucosa - 6 - fosfatasa, una enzima, convierte la glucosa - 6 - fosfato en glucosa, que puede ser transportada a la sangre.
Reserva Intracelular de Calcio
También se encarga de recoger y almacenar el calcio presente en el citosol (Rubio, 2019). Este proceso se lleva a cabo mediante bombas de calcio localizadas en la membrana. El calcio almacenado en el interior del orgánulo puede ser liberado masivamente cuando se recibe la señal correspondiente, ya sea del interior o exterior de la célula (Rubio, 2019). Este mecanismo es especialmente relevante en las células musculares, donde el retículo endoplasmático liso es conocido como retículo sarcoplásmico (Fernández, 2024). Cuando una motoneurona, encargada del movimiento muscular, recibe un impulso nervioso, el retículo provoca la liberación de acetilcolina en la placa neuromuscular (Rubio, 2019). La acetilcolina se une a los receptores en la célula muscular, lo que provoca la despolarización de la membrana. A raíz de esta despolarización, se liberan iones de calcio que estaban almacenados en el retículo sarcoplásmico, los cuales pasan al citosol. Así, según Rubio (2019), se lleva a cabo la contracción muscular ordenada por el sistema nervioso.
Estructura
El retículo endoplasmático liso se distribuye por todo el citoplasma de la célula y está formado por una red de túbulos membranosos interconectados (Fernández, 2024). A diferencia del retículo endoplasmático rugoso, el retículo endoplasmático liso carece de ribosomas en su membrana. Su estructura varía según el tipo celular y puede presentar cisternas, que son expansiones o dilataciones en su forma. Además, en el retículo endoplasmático rugoso se encuentran pequeñas áreas de retículo endoplasmático liso, las cuales sirven como puntos de salida para las vesículas que se desprenden del retículo endoplasmático rugoso. Conforme con Fernández (2024), estas áreas se conocen como retículo endoplasmático de transición.
Diferencias Entre el Retículo Endoplasmático Liso y Rugoso
El retículo endoplasmático liso y el retículo endoplasmático rugoso son dos componentes del retículo endoplasmático que desempeñan funciones distintas dentro de la célula (Fernández, 2024). La principal diferencia en su apariencia radica en la presencia de ribosomas. El retículo endoplasmático liso carece de ribosomas en su membrana, lo que le otorga una apariencia lisa. En cambio, el retículo endoplasmático rugoso posee ribosomas adheridos a su membrana externa, lo que le confiere una apariencia rugosa. En cuanto a su función, el retículo endoplasmático liso participa en la síntesis de lípidos, el metabolismo de carbohidratos, el almacenamiento de calcio y la detoxificación de sustancias tóxicas. Por otro lado, según Fernández (2024), el retículo endoplasmático rugoso es responsable de la síntesis de proteínas y de su posterior modificación.
En términos de ubicación, el retículo endoplasmático liso se encuentra distribuido en el citoplasma, mientras que el retículo endoplasmático rugoso se sitúa más próximo a la membrana nuclear (Fernández, 2024). Además, la estructura del retículo endoplasmático liso es tubular, formada por una red de túbulos membranosos interconectados. El retículo endoplasmático rugoso, por su parte, presenta una estructura más compleja debido a la presencia de ribosomas en su superficie externa. Finalmente, en cuanto a su abundancia, el retículo endoplasmático liso es predominante en células que requieren una alta síntesis y metabolismo de lípidos, como las células hepáticas responsables de la detoxificación. Por su parte, de conformidad con Fernández (2024), el retículo endoplasmático rugoso es más abundante en células especializadas en la producción de proteínas, como las células pancreáticas encargadas de generar enzimas digestivas.
Referencias
Fernández, K. C. (2024, marzo 15). Retículo endoplasmático liso: qué es y función. ecologiaverde.com. https://www.ecologiaverde.com/reticulo-endoplasmatico-liso-que-es-y-funcion-4840.html
Megías, M., Molist, P., & Pombal, M. Á. (2023). Retículo Endoplasmático. Atlas de Histología Vegetal y Animal. https://mmegias.webs.uvigo.es/5-celulas/5-reticulo.php
Porto, J. P., & Gardey, A. (2014, mayo 5). Retículo endoplasmático liso. Definición.de; Definicion.de. https://definicion.de/reticulo-endoplasmatico-liso/
Rubio, N. M. (2019, agosto 9). Retículo endoplasmático liso: definición, características y funciones. pymOrganization. https://psicologiaymente.com/salud/reticulo-endoplasmatico-liso
Comments